El 16 de marzo de 2020, pasadas las 21 horas, el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, anunciaba el inicio de la cuarentena estricta en el marco de la pandemia de coronavirus y así comenzaba un período inédito, cargado de incertidumbre y con datos estadísticos inapelables que echaron por tierra las especulaciones y certificaron el impacto del virus en toda la provincia.

Si bien esa jornada es considerada el día cero del aislamiento social, preventivo y obligatorio en la provincia -decretado incluso una semana antes que a nivel nacional-, los hechos sucedidos en los días previos presagiaban que el impacto del coronavirus podía ser muy grave en todo el territorio fueguino.

Es que la gestión de Melella, asumida hacía exactamente 90 días, se encontraba en pleno ordenamiento del Estado, que incluía conocer a ciencia cierta no solo cómo se encontraban las finanzas provinciales sino, además, el cuadro de situación de cada una de las áreas vitales, como educación, salud y seguridad.

Pero el estrecho vínculo de la provincia con la actividad turística y la creciente llegada de turistas extranjeros a Ushuaia, como puerta de entrada a Tierra del Fuego, encendían todas las alarmas y obligaron al mandatario a tomar la decisión más temida: pedirle a la sociedad fueguina que se resguarde en sus viviendas para evitar la propagación del coronavirus.

 

11 de marzo

 

 

Habiendo acordado salarios con los gremios estatales y con los docentes en las aulas, marzo no podía arrancar mejor para una gestión que hacía sus primeros pasos. El mundo ya hablaba del nuevo virus y bastó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretara al coronavirus como pandemia para que Tierra del Fuego tomará la primera decisión.

A las 14:17, se anunciaba que el Comité Operativo de Emergencia (COE) decidía suspender los eventos públicos e institucionales del gobierno de la provincia, haciendo extensiva la medida también a los municipios.

'Se está trabajando en un protocolo particular para las instituciones de la tercera edad, generando acciones concretas de prevención dirigidas a adultos mayores, que representan el sector más vulnerable de la población', aseguraban en el parte de prensa.

Asimismo, se implementaba el aislamiento de personas que provengan de países donde hay vinculación con el virus como China, Corea, España, Italia, Alemania, Japón, Irán y Francia, entre otros, lo que ponía en jaque al sector turístico.

 

12 de marzo

 

 

A las 10:34, el COE confirmaba el cierre momentáneo y la suspensión de las actividades que se llevaban a cabo en espacios que contenían a adultos mayores, como centros u hogares de día de toda la provincia.

'Sabemos que los adultos mayores son el grupo más vulnerable frente a este virus, al menos los datos oficiales así lo reflejan, por eso hemos tomado esta determinación para prevenir así un posible contagio y preservar su salud', justificaba la ministra de Salud, Judit Di Giglio.

Por otra parte, a las 12:39 se tomó la decisión de distribuir de forma domiciliaria los módulos alimentarios y los kits escolares a las personas que figuraban en la nómina de la Secretaría de Desarrollo Humano.

Además, confirmaban que, para cualquier trámite, solo se recibirían consultas de forma telefónica, por lo que no iba a ser necesario realizar trámites de renovación, al suspenderse las bajas. Las emergencias se atenderían de forma domiciliaria a los efectos de evitar la concentración de personas en las oficinas.

También se determinó dejar sin efecto la realización de la carrera 'Vigilia por Malvinas-Donar Sangre es dar Vida', la cual estaba prevista para realizarse el 1 de abril en la plaza Islas Malvinas. La situación epidemiológica en el país y el mundo ya hacían advertir que la pandemia de coronavirus no era momentánea y, mucho menos, pasajera.

 

 

Por esos días, el máximo temor del gobierno provincial era que el coronavirus ingresara por el puerto de Ushuaia y desde allí se diseminara descontroladamente a toda la provincia. Ante ello, se reforzaron los controles sanitarios en la terminal portuaria.

El presidente de la Dirección Provincial de Puertos (DPP), Roberto Murcia, aseguraba ese día que 'cada uno de los buques tiene su propio protocolo, de forma tal que presentan una declaración jurada dando cuenta que los pasajeros no tienen ningún tipo de enfermedad infecto-contagiosa'.

A su vez, explicaba que 'se viene trabajando junto a Sanidad de Fronteras; el Ministerio de Salud y Prefectura Naval Argentina, donde se monitorean 24 horas antes que lleguen los buques a puerto solicitando si existe alguna novedad sanitaria de los tripulantes'.

A las 18:30 se emitió el primer parte epidemiológico de Tierra del Fuego. Ese día, se informó que no había casos positivos. El informe del día señalaba que existían cinco pacientes en estudio por considerarlos sospechosos y de igual modo se especificó que todos se encontraban en óptimo estado de salud, con aislamiento domiciliario a la espera de resultados.

A su vez, se indicó ese día que habían contabilizado 38 pacientes asintomáticos aislados de manera preventiva en sus domicilios cumpliendo cuarentena, de los cuales 31 eran de Ushuaia y siete de Río Grande. A partir de allí se volvió, para muchos, una costumbre esperar el parte diario para saber cómo avanzaba el coronavirus en toda la provincia.

 

13 de marzo

 

 

La mañana arrancaba a las 8:20 con el primer anuncio del día. El Banco de Tierra del Fuego aconsejaba a la población evitar la asistencia a las sucursales y realizar las operaciones bancarias a través de los canales electrónicos, para así evitar posibles contagios y colaborar con los esfuerzos realizados por distintos organismos en la provincia para evitar la propagación del virus.

Y con la misma velocidad que se iban tomando medidas restrictivas, también se propagaban las noticias falsas. A las 9:05 el gobierno provincial se vio obligado a desmentir una información que se viralizó y daba cuenta de la activación del protocolo por coronavirus en el vuelo que durante esa madrugada debía llegar a la ciudad de Río Grande proveniente de Buenos Aires.

'Sí existió una emergencia por una persona que en pleno comenzó a mostrar malestar que obligó al personal de Aerolíneas Argentinas a retornar a la ciudad de Buenos Aires en resguardo de la salud de la pasajera', aclararon desde el Ejecutivo provincial.

A las 11:16, el gobierno tomaba una decisión drástica que golpeó fuertemente en los meses sucesivos a un sector productivo. Se determinaba a esa hora suspender todas las actividades propias e institucionales que se desarrollen dentro de los espacios deportivos provinciales y municipales.

Asimismo, se impuso que las actividades en gimnasios y clubes deportivos privados sería sin espectadores y aquellas actividades con turnos consecutivos, debían tener un intervalo mínimo de 15 minutos entre un turno y el siguiente. Días después, el cierre definitivo de los gimnasios y clubes provocó el declive de una actividad que aún hoy trata de recuperarse.

 

 

A las 11:52 se anunciaba que el gobernador Gustavo Melella mantendría una videoconferencia con el presidente Alberto Fernández, junto a mandatarios de todas las provincias del país. Ya se hablaba en la prensa nacional que el cierre y el aislamiento en todos los distritos era una posibilidad cada vez más firme.

Tras la reunión en la que Melella fue acompañado por parte de la cartera sanitaria provincial, el gobernador aseguraba que 'estamos ante una situación difícil a nivel nacional como en el mundo y, obviamente, Tierra del Fuego no es ajena, pero se han tomado medidas llevadas adelante escuchando a los científicos. Son medidas con las que intentamos mitigar la situación'.

'Tenemos que tener la tranquilidad de que el Estado nacional y el Estado provincial, están haciendo todo lo posible para mitigar al máximo las consecuencias de esta pandemia', consideraba y sumaba: 'Tierra del Fuego, por el momento, está libre de casos de coronavirus. Hemos tomado todas las medidas necesarias que, de acuerdo a este virus, se pueden ir modificando. Estamos haciendo el máximo esfuerzo para poner, junto con los intendentes y las organizaciones, las mayores herramientas posibles para mitigarlo'.

Previendo que la situación podía empeorar, el gobierno fueguino determinaba a las 14:18 adherir a la resolución nacional para que los trabajadores y las trabajadoras gocen de licencias excepcionales en casos de aislamiento.

A las 21:35 se informaba que el COE activaba el protocolo de salud debido a la detección de un posible caso sospecho en la ciudad de Río Grande. A partir del interrogatorio realizado por parte de los profesionales a un familiar del paciente, se activaba el protocolo de emergencia a partir de una persona oriunda de Alemania que expresaba tener síntomas compatibles con coronavirus.

 

14 de marzo

 

 

A primera hora, el gobierno fueguino informaba que Gustavo Melella decretaba la Emergencia Sanitaria por el término de un año en todo el ámbito de la provincia como medida para avanzar y profundizar los controles en el marco de la pandemia de coronavirus.

En el mismo sentido establecía la adhesión en todos sus términos al Decreto de Necesidad y Urgencia emitido por el presidente Alberto Fernández, que, entre algunas de sus medidas, declara como zonas de riesgo a Estados Unidos, España, Italia, Alemania, Francia China, Irán y Corea del Sur.

De acuerdo al decreto firmado por Melella sería el Ministerio de Salud la autoridad de aplicación de las medidas que se entendían necesarias respecto de la situación epidemiológica, a fin de mitigar el impacto sanitario.

Además, se autorizaba la contratación y el ejercicio de profesionales y técnicos de salud titulados en el extranjero, cuyo título no esté revalidado o habilitado en el país, 'siempre que el objeto de la contratación guarde estricta relación con medidas que deban aportarse en el marco de la emergencia'.

En su artículo sexto el decreto suspendía por 30 días 'el desembarco de pasajeros en cuya embarcación naveguen pasajeros provenientes de países de riesgo declarados por el Ministerio de Salud de la Nación, a excepción de pasajeros de aquellas embarcaciones que hubiesen permanecido embarcados por un plazo mayor a los 14 días'.

También se suspendía por el mismo lapso el ingreso de turistas por vía terrestre, por la frontera, cuando provenían de países de riesgo declarados por el Ministerio de Salud de la Nación, considerando el paso por Chile como 'en tránsito', a excepción de aquellos que reingresaban al país proveniente del continente y hayan permanecido en forma previa por un lapso mayor de 14 días.

 

 

Temiendo la propagación de casos, y para llevar tranquilidad a la sociedad, el gobierno convocaba a conferencia de prensa. Allí, la ministra de Salud, Judith Di Giglio, manifestaba que 'en esta situación es sumamente importante la conciencia social y que todos y todas tomemos las medidas de prevención que están recomendadas. El mejor método es el lavado de manos, no solo para coronavirus sino para todas las enfermedades de infección respiratoria'.

'Debemos evitar también lugares donde concurren muchas personas, no dar besos al saludar, evitar compartir el mate y mantener los ambientes ventilados. Además, se deben limpiar frecuentemente las superficies y objetos que manipulamos a diario. Es importante también que los mayores de 65 años que son el sector más vulnerable mantengan aislamiento social', recomendaba la funcionaria fueguina.

En la misma conferencia de prensa, realizada en Río Grande, la ministra de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, Analía Cubino, aseguraba que 'hay un protocolo nacional y en el caso que se confirme un caso sospechoso en una escuela ya sea de un estudiante, un docente, un directivo o personal no docente, en ese caso particular se tomará la decisión de cerrar esa escuela. Esto es lo que ha determinado la Nación también'.

'Las medidas que se están tomando no son en base a decisiones políticas, sino que obedecen a cuestiones científicas. Se van tomando de manera dinámica atendiendo a cómo evoluciona la situación, pero siempre en función de esas recomendaciones. En la provincia no hay casos confirmados y por tanto hoy no es necesario tomar una determinación total del sistema educativo', enfatizaba la titular de la cartera educativa.

Esa misma jornada, pero a las 18:00, se develaba un nuevo parte epidemiológico. En el mismo se aseguraba que no había casos confirmados de coronavirus en la provincia y que, de siete casos sospechosos constatados hasta ese momento, uno fue descartado y el resto permanecía en aislamiento preventivo esperando los resultados que por aquel entonces remitía únicamente el Instituto Malbrán.

Un rato después, se conocía una noticia que tendría impacto nacional. El presidente de la DPP, Roberto Murcia, confirmaba que 'a las 00:15 del domingo 15 debía arribar el crucero Ventus Australis, pero debido a que viene con pasajeros que pasaron por zonas afectadas y no cumplen el período de aislamiento que se le solicita mediante decreto, se comunicó al barco que no se le permitía desembarcar'.

De esta manera, el funcionario confirmaba que 'el barco no va a tocar el puerto de Ushuaia y regresa a su puerto origen que es Punta Arenas' y precisaba que 'el puerto no está cerrado, lo que restringe es el descenso de pasajeros que hayan estado dentro de los últimos 14 días en una zona afectada'.

 

15 de marzo

 

 

La mañana comenzaba con un anuncio del gobernador fueguino. A las 10:00 se comunicó que todos los agentes del sector público que integraban grupos de riesgo, quedaban exentos de presentarse en sus lugares de trabajo, sin que esto perjudique el presentismo ni las horas extras.

La medida incluía también a quien tuviera indicación médica de guardar aislamiento por cualquier tipo de circunstancia. Además, todos aquellos trabajadores estatales que regresaban de países provenientes declarados de riesgo por el Ministerio de Salud de la Nación, debían autoaislarse y contarían con la licencia excepcional que justificaba las inasistencias por el plazo de 14 días desde que ingresaban al país.

A las 11:00, autoridades de gobierno se reunían con representantes de las cámaras de hotelería, gastronomía, referentes del turismo, agencias de viajes y turismo para dar a conocer las medidas preventivas para el sector.

El cese de la actividad golpeó fuerte a uno de los sectores productivos de mayor preponderancia en la provincia y, particularmente, en Ushuaia. Fue tal el impacto que meses después, el gobierno fueguino debió asistir económicamente a la actividad para su subsistencia.

Fue una jornada de múltiples rumores. Un domingo en el que las versiones de cierre definitivo de la provincia y cuarentena, cobraban fuerza con el correr de las horas. Las sospechas de muchos empezaban a volverse realidad cuando se informó que habría mensaje de Gustavo Melella en cadena provincial.

'Son momentos difíciles, donde tiene que primar la tranquilidad y tenemos que pasarlo lo mejor posible, y esto tiene que ver con nuestra responsabilidad, de cuidarnos y cuidar al otro', manifestaba y aseguraba que 'más allá de las medidas nacionales que celebramos y acompañamos quiero comunicar que a partir de este lunes 16, por el lapso de 15 días se van a suspender las clases de todos los niveles educativos, sin concurrencia a las escuelas'.

 

 

Y agregaba que 'aquellas familias que necesitan el servicio del comedor o merendero, se dispuso que una vez a la semana, personal del Estado provincial, acerque los alimentos necesarios para que las familias accedan al alimento, cumpliendo con la función social que tiene la escuela'.

Igualmente comunicaba que 'todos los servidores públicos provinciales, de los entes autárquicos y demás instituciones de la provincia, por el plazo de estos 15 días no asistirán a sus lugares de trabajo. Tendrán el beneficio del goce de haberes como corresponde. Los ministros tendrán la responsabilidad y la autoridad de salvaguardar algunas guardias mínimas para no dejar de brindar los servicios que el resto de los fueguinos necesitan'.

'Personal del Ministerio de Salud, la Policía, Protección Civil y Penitenciaría estarán disponibles como siempre. Quiero agradecer y felicitar a todo el personal de salud de nuestra provincia, porque son los que siempre, de distinta manera, cuidan nuestra vida poniendo en juego la de ellos. En nombre de Tierra del Fuego queremos agradecerles y felicitarlos por el trabajo impecable que vienen realizando', subrayaba.

Y precisaba que 'invitamos también a la actividad privada, sabemos que son momentos económicos complejos, pero entendemos que la única manera de parar el virus, es parando nosotros, es quedándonos en casa, es teniendo menos movilidad. Por eso invitamos al sector privado en la medida que puedan y se vayan organizando'.

'No son tiempos de vacaciones, son tiempos de cuidarnos; por eso es importante y ha dispuesto el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología que durante este tiempo a través de distintas aplicaciones y dispositivos nuestras chicas y chicos tendrán tareas para que estén ocupados dentro de los hogares, como así también se comenzará a implementar el programa de capacitación para nuestros docentes, para que en este tiempo también puedan seguir formándose', explicaba.

Melella enfatizaba que 'hemos visto distintas circunstancias de preocupación de vecinos y vecinas por un problema de desabastecimiento, queremos llevar tranquilidad porque esto no pasa ni va a ocurrir. Y vamos a trabajar con ellos para garantizar la distancia social que necesitamos. Venimos trabajando con los responsables de los supermercados y lo mismo con el combustible'.

'Les pedimos de corazón que hagamos el máximo esfuerzo de quedarnos en casa, de cuidarnos, de hacer práctica cotidiana de aquellas acciones que tienen que ver con la prevención. Es importante que no nos movamos de nuestros hogares para poder inmovilizar al virus', aconsejaba.

 

16 de marzo

 

 

Un día después de intensificar las medidas de restricción, el anuncio de cuarentena total llegaba en la voz del mandatario fueguino. Pero previo a ello, alrededor de las 9:00 la mirada se centraba en morigerar uno de los mayores temores de la sociedad.

Así, el secretario de Comercio, Aníbal Chaparro, informaba que había mantenido comunicación con autoridades de las grandes cadenas de supermercados que operaban en la provincia, quienes aseguraron que la provisión de productos iba a ser normal.

Un rato después, la ministra de Salud, Judith Di Giglio, daba a conocer los primeros casos confirmados de coronavirus en la provincia: 'Al momento, existen en Tierra del Fuego dos casos positivos de personas contagiadas de coronavirus'.

A media tarde, Melella se reunía con los intendentes de Ushuaia, Walter Vuoto; de Tolhuin, Daniel Harrington y de Río Grande, Martín Pérez, a fin de analizar las acciones preventivas que se realizaban en la provincia a partir de las disposiciones de Nación y las particularidades de la provincia.

Ya por la noche, habiendo comunicado la decisión a los intendentes, Melella volvía a hacer uso de la cadena provincial para informar el cierre total de la provincia. Eso que se presagiaba hacía varios días se confirmaba a toda la provincia en un mensaje emitido por la televisión pública.

'Vivimos momentos muy duros ante una enfermedad que va creciendo y que va golpeando nuestras vidas. Es por eso que, junto a los expertos, a los intendentes de las tres ciudades y a distintos sectores de la sociedad hemos decidido avanzar en las medidas de prevención y contención del virus', comenzaba diciendo Melella.

 

 

Y proseguía asegurando que 'necesitamos ganarle y la única manera de hacerlo es deteniéndonos y quedándonos en nuestros hogares. Es por eso que vamos a tomar medidas que parecen más fuertes pero que nos van a cuidar mucho más a todos, comunitariamente e individualmente'.

El gobernador informaba respecto de esto que 'a través de un decreto vamos a establecer la suspensión y paralización a partir de hoy de todo tipo de actividad, de nuestras industrias, del comercio, del turismo, de la recreación. No están alcanzados aquellos locales comerciales que tengan que ver con la venta de alimentos porque eso está garantizado, no tenemos que entrar en la desesperación. Los supermercados y los almacenes de barrio que tenemos a la vuelta de nuestra casa van a poder permanecer abiertos. Solo les pedimos que tengan horarios exclusivos para las personas adultas y las que están en mayor riesgo'.

'Necesitamos cuidarnos, necesitamos quedarnos en casa. Es la única manera en que los fueguinos podremos minimizar el impacto de esta enfermedad. Es cierto que esto trae problemas económicos, pero es cierto también y mucho más doloroso que este virus pone en riesgo la vida de muchos. Por eso les pido a los chicos, a los adolescentes, a los jóvenes, a los adultos y a los adultos mayores que hagamos el gran esfuerzo y el gran sacrificio de quedarnos en nuestros hogares. No son días de vacaciones. Son días en los cuales sin perder la esperanza debemos quedarnos en casa', enfatizaba.

De acuerdo al decreto provincial se establecía que los niños, niñas, adolescentes y grupos de riesgo no deben salir de sus domicilios, debiendo cada familia designar un adulto responsable para realizar la compra de productos alimenticios, medicinas y de primera  necesidad.

Quedaba, a su vez, suspendida la realización de toda actividad industrial, comercial, recreativa y deportiva tanto pública como privada y la realización de toda actividad turística (museos, excursiones, etc.).

Los bares, restaurantes, y todo otro local comercial de elaboración y/o venta de comidas con permanencia o sin permanencia de ingesta de alimentos en el local, solo podrían a partir de ese día mantener abiertos sus comercios para la preparación y venta de alimentos bajo la modalidad de entrega a domicilio y/o retiro del local sin permanencia en el mismo.

Únicamente podrían circular por la vía pública las personas para la realización de las siguientes actividades: adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad; asistencia a centros sanitarios; desplazamiento al lugar de trabajo para efectuar su prestación laboral, empresarial o profesional, siempre que la tarea no pueda ser realizada en el domicilio; desplazamiento para la asistencia y cuidado de mayores, menores y dependientes, personas con discapacidad o especialmente vulnerables y el desplazamiento a puertos, aeropuertos y otros centros de transporte y asistencia esenciales.

 

Un año después

 

 

El 16 de marzo de 2021 encuentra a los fueguinos inmersos en plena vacunación contra el coronavirus. Algo más del 10 % de la población objetivo -un total aproximado de 60 mil personas- dispuesta por el Ministerio de Salud de Tierra del Fuego, ya se inoculó contra el coronavirus.

La mayoría de las actividades regresaron a la 'normalidad'. Salvo los boliches y locales nocturnos, el resto de los rubros privados -aunque con limitaciones- trabaja intentando recuperar los índices productivos previos a la pandemia.

Sin embargo, y a pesar de los promisorios augurios de los especialistas, hay datos que no se pueden soslayar. En toda la provincia, 22.628 personas padecieron en carne propia el impacto del coronavirus. Más de 800 fueguinos debieron ser internados, durante todo un año, en las unidades de terapia intensiva de hospitales y centros médicos de Ushuaia, Tolhuin y Río Grande. Pero el peor dato da cuenta que 356 personas ya no están entre nosotros a causa de la pandemia que hace un año, nos cambió la vida.